Hoy al cumplirse el sexto aniversario del paso de la Madre Pilar Navarro Garrido a la casa del Padre, todas las misioneras de la Compañía Misionera del Sagrado Corazón de Jesús, recordamos lo que ella era:
Su pasión fortaleza y gran corazón no impidieron que se trasluciese su gran sencillez, amor maternal y lleno de ternura para con todos y su gran preocupación por todas las misioneras y misiones extendidas por Asia, Africa y América.
El lema de su vida lo expresó en estas sencillas palabras coherentes con lo que ella vivió hasta el final:
"... la voluntad de Dios,
el único anhelo y
la razón de ser de toda mi vida..."
(M. Pilar Navarro)
Y también hoy queremos vivir lo que nos dijo en la IV Asamblea General de 1984:
"Hermanas, un día quiso Dios que el DON del Carisma lo recogieran mis manos: abran las manos, en cada una de nosotras, está el CARISMA recibido".
Que estas palabras de Madre Pilar, nos empuje a cada una de las misioneras religiosas y laicas de la COMPAÑIA MISIONERA DEL SAGRADO CORAZON DE JESUS, a vivir el CARISMA y compartirlo con los demás.
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