RENACE LA ALEGRÍA EN NUESTRO CORAZÓN

El domingo 2 de Noviembre vivimos con el grupo de jóvenes, una experiencia muy profunda  de la fiesta del DOMUND y lo que esto implica en nuestra vida.

Después de saludarnos  y sentirnos felices de volvernos a encontrar para vivir esta jornada misionera, cantamos varios cantos misioneros y la Hermana Juliana María nos introdujo en el sentido que tenia el DOMUND y a lo que se nos invitaba.

Algunos jóvenes desconocían el sentido del DOMUND y el poder profundizar en ello, nos  abrió  horizontes distintos.

Vimos un vídeo que nos llegó muy al corazón "Llamados a hacer resplandecer la Palabra de Dios" y pudimos compartir lo que a cada uno nos invitaba.

Hermana. Juliana María acompañando a uno de los grupos.

Fue muy interesante la reflexión que tuvimos en los grupos  sobre las siguientes  preguntas:

         1. Que me dice  el slogan: RENACE  LA ALEGRÍA?.

       2. ¿Que es lo que me produce una alegría profunda?.

       3. Muchas veces decimos: las  misiones las tenemos acá y tenemos  mucho que hacer ¿por q          qué  preocuparnos por las misiones lejanas?.

       La  puesta en  común fue muy rica y  nos ayudó a entender mejor la MISIÓN AD GENTES, la 
u     urgencia de la misión y el compromiso misionero  que todos tenemos.

a  La Hermana Montserrat Ripollés, que estaba por Lima,  nos competió de forma sencilla su                 testimonio vocacional, como ella desde joven se sintió llamada por el Señor y como fue
    discerniendo lo que el Señor quería de ella. Después de su formación en España vino al Perú y fue  destinada a  Santa María de Níeva, departamento de Amazonas en el año 1954 para trabajar con        los  hermanos awajum y wampis, dónde actualmente sigue compartiendo su vida  en esa misión y    se siente muy feliz. Ha sido profesora de Educación Primaria y ahora  está  trabajando en la                 formación de etsejein (catequistas)   y en  la formación de comunidades cristianas. Gozamos de 
  compartir la experiencia de esta hermana misionera que se siente MUY FELIZ DE SU                         VOCACIÓN MISIONERA. 

Terminamos la Jornada con una  oración misionera, que nos llevó a abrir nuestro corazón al mundo entero y presentar al Señor las necesidades de cada continente.

Tuvimos presente a cada una de las hermanas de la Compañía que están viviendo en las distintas misiones.

Y rezamos el Padre Nuestro todos cogidos de las manos, uniéndonos al mundo entero y sintiéndonos hermanos de todos.

     

    Y nos fuimos con el deseo de hacer realidad lo que esta canción nos dice:

"ID AMIGOS, POR EL MUNDO,  ANUNCIANDO EL AMOR,

MENSAJEROS DE LA VIDA, DE LA PAZ Y DEL PERDÓN

SED AMIGOS, LOS TESTIGOS DE MI RESURRECCIÓN,

ID LLEVANDO MI PRESENCIA, CON USTEDES ESTOY".